Monarca Sabio - Volume 1 - SM - Capítulo 55

Capítulo 55: El Paradero de Yun Hailan.

Saber el paradero de Yun Hailan era una de sus prioridades ahora que se encontraba en el Instituto Semi-Inmortal, y ya había empezado a intentar ubicarla.

Este instituto era un lugar descomunal, con demasiados edificios como para siquiera contarlos e incontables secretos. Encontrar a una persona era como buscar una aguja en un pajar.

—¿Yun Hailan? —Li He sacudió la cabeza, al parecer no estaba familiarizado con el nombre. Aunque después de un momento, sus ojos se iluminaron súbitamente—. Espera, he escuchado de alguien con ese nombre. ¿Una chica, cierto?  Se unió al instituto hace pocos meses. Pero no es una estudiante principiante; un estudiante de nivel alto tomó interés en ella, así que ya está en la Facultad de Estudiantes de Élite.

—¿¡Qué!? ¿Entró directamente a la Facultad de Estudiantes de Élite?

La Facultad de Estudiantes de Élite era facultad más alta dentro del Instituto Semi-Inmortal, y cada uno de sus miembros era un Usurpador de Vida.

Y no había ningún modo en el que Yun Hailan ya estuviera al nivel de un Usurpador de Vida, ¿cómo pudo haberse unido a la Facultad de Estudiantes de Élite? La última vez que Yang Qi la vio estaba apenas en la sexta etapa.

Por supuesto, también estaba al tanto de que era una arpía astuta, y había mantenido guardado gran parte de sus verdaderos poderes.

Pero de ningún modo podía estar al nivel de Usurpación de Vida, eso era seguro.

—Creo que pudo haber tenido algo que ver con un acuerdo entre el Instituto Semi-Inmortal y el Instituto del Dios Marino. —Li He sacudió la cabeza y prosiguió—. De acuerdo con los rumores, hay algo especial con el linaje de la chica. Es una persona importante, ¿Sabes? Alguien a quien nosotros los estudiantes principiantes no podemos ni esperar a emular.

En el rostro de Yang Qi apareció una expresión seria. —«Jamás me hubiera imaginado que Yun Hailan se uniría de inmediato a la Facultad de Estudiantes de Élite…»

Yun Hailan ahora estaba en una posición de cierto renombre. Al fin y al cabo, Yang Qi en este momento podía ganarle a diez Maestros de Energía juntos, pero sería un suicidio causarle problemas a alguien al nivel de esa facultad.

Tomando en cuenta el nivel actual de su base de cultivo, obviamente no tenía la confianza de poder enfrentar a un Usurpador de Vida.

—Muy bien Hermano Menor. De ahora en adelante eres un estudiante principiante oficial del Instituto Semi-Inmortal. ¿Por qué no me dejas presentarte a tus nuevos Hermanos mayores y menores? Después de todo, estaremos cultivando juntos a diario.

Dicho eso, Li He se llevó a Yang Qi a conocer a otros de los estudiantes principiantes. En el camino, le recordó varias veces no moverse a la deriva por el instituto. Era una organización grande y complicada, los estudiantes principiantes debían permanecer en su sitio y no causar problemas, por lo general debían atender labores diarias, cultivar, estudiar, y hacer lo que los Maestros de Energía les pidieran.

De vez en cuando podían viajar afuera del instituto para llevar a cabo misiones a cambio de puntos de mérito, y esa era la manera en la que eventualmente podrían ser promovidos.

Por lo que Yang Qi veía, los puntos de mérito eran lo más importante en el Instituto Semi-Inmortal.

Se ganaban llevando a cabo servicios meritorios, y el instituto mantenía registro de ellos. Por ejemplo, un estudiante podía ir a cazar engendros demoniacos para recolectar núcleos demoníacos, y luego volver al instituto e intercambiarlos por puntos de mérito. Algunas personas absurdamente ricas hasta entregaban píldoras de convergencia de energía para comprarlos.

Con los puntos de mérito se podía ir al Pabellón de Escrituras para estudiar disciplinas marciales y artes energéticas inigualables, o adquirir la ayuda de un gran experto para refinar la energía verdadera y el cuerpo carnal. También se podían comprar tesoros, o que el instituto te impartiera técnicas poderosas directamente a la mente.

Gracias a todo esto quedaba claro lo importantes que eran los puntos de mérito.

Después de poco tiempo, Yang Qi ya se había asentado en el Instituto Semi-Inmortal, y su vida se convirtió en una rutina más bien aburrida. Aparte de montar guardia y otras labores de poca importancia, se la pasaba cultivando en su habitación o asistía a clases en las que los Maestros de Energía hablaban sobre el cultivo. No había nada particularmente emocionante.

Los estudiantes principiantes eran lo de rango más bajo, y apenas tenían acceso a las artes energéticas y disciplinas marciales más fundamentales del Instituto Semi-Inmortal.

Dicho eso, Yang Qi estaba contento con todo. Poder cultivar pacíficamente implicaba que su Fuerza del Mamut Divino Supresor Infernal seguía haciéndose más refinada con cada día que pasaba. Cada vez se hacía más fuerte y sus ejercicios de respiración eran más profundos; a estas alturas, ya podía absorber fácilmente la quintaesencia del sol y la luna, así como también la energía espiritual de los Cielos y la tierra.

De ese modo pasó un mes en el que no ocurrió nada.

Hasta su mente y su alma se fortalecían; sentía casi como si de verdad fuera un mamut divino, un ser capaz de arrancar estrellas y lunas del cielo.

En este momento estaba sentado de piernas cruzadas en su habitación y su energía verdadera circulaba por sus meridianos.

Apenas se podía distinguir una convergencia de energía verdadera que burbujeaba como lava dentro de la región de su dantian. Si alguien hubiera podido observarlo, se habría percatado de un resplandor dorado que titilaba bajo su piel. Era casi como si ya no estuviera hecho de carne y sangre, sino de oro.

El oro era perpetuo, y en este momento un aura perpetua lo llenaba.

La membrana bajo su piel había sido transparente antes, pero ahora se había vuelto dorada.

Repentinamente abrió sus ojos y su boca, y escupió una ráfaga de energía verdadera, la cual se envolvió alrededor de una espada envainada que colgaba de la pared. Esta espada salió de su funda y se movió por el aire hacia él. Entonces la sujetó en medio del aire, la blandió frente a él, e hizo que unos pulsos de energía gélida surgieran por todos lados.

Esta era una espada valiosa forjada allí en el Instituto Semi-Inmortal, estaba hecha con metales poco comunes, y era tan afilada que podía cortar el hierro como si fuera arcilla.

Yang Qi tomó esa cuchilla y la pasó por la palma de su mano sin vacilar.

Sin embargo, no quedó ni una marca en su piel.

Ni siquiera esa espada tan increíblemente afilada podía herirle.

Y a estas alturas, ni siquiera había fusionado su energía verdadera con su cuerpo carnal.

¡Clac!