Monarca Malvado de Otro Mundo - Volume 6 - OEM - Capítulo 546

Capítulo 546: ¡Gran Ceremonia!

¡Bang!

Oso Grande gritó con un sonido extraño mientras era enviado a volar como un cohete. Luego se estrelló contra la silla en la que había estado sentado originalmente. Hay que mencionar que había estado atrapado en la Jaula del Mundo cuando fue expulsado. Por lo tanto, no había tenido ningún medio para descargar el impulso de su caída. En consecuencia, su caída fue bastante severa, y se sintió mareado.

La cara de Mei Xueyan se había puesto roja, y sus ojos irradiaban el esplendor de la ira.

“¡Este tipo realmente no sabe hablar! ¿Qué diferencia hay entre dormir en la misma cama y meterse en las mismas mantas? ¿No es una tontería? Sería raro que la Hermana Mayor y el Cuñado no se metieran en la misma cama… Aaah…” Rompe-Tierra había empezado a acariciar sus bigotes mientras se alegraba de la desgracia de Osa Grande. Su boca todavía estaba llena de la suave fragancia de la píldora. Había sacudido la cabeza mientras pensaba que aún conseguía halagar a su hermana mayor. De hecho, sus expresiones hacían parecer que estaba muy satisfecho consigo mismo.

Sin embargo, no se había dado cuenta de que sus halagos no se habían desviado mucho de lo que había hecho que Oso Grande se ganara esa paliza…

Se podría decir que Oso Grande había fracasado en adular con su hermana mayor. Y, en cambio, había recibido una paliza. Sin embargo, Rompe-Tierra había intentado añadir aceite al fuego. Pero, su intento había atraído el fuego furioso sobre su propio cuerpo…

Por lo tanto, su política de “hacer golpear al Viejo Oso para salvar al Viejo Tigre” fracasó esta vez. Y, como resultado, los dos hermanos terminaron en el mismo lugar.

“¡Tu tambien piérdete! ¡Jaula del Mundo!” Mei Xueyan estaba extremadamente agitada.

“¡Bang Bang!”

Rompe-Tierra dejó escapar un miserable chillido mientras su garganta era medio golpeada por la espalda. Sus extremidades aparentemente comenzaron a bailar mientras era enviado a volar en el aire. Se elevó hacia las nubes mientras cabalgaba sobre la niebla. Su cabeza se golpeó contra la puerta del Patio de la Fragancia Elegante. Sin embargo, derribó la puerta y siguió volando hacia el exterior. Luego, finalmente se estrelló contra la pared opuesta, y rebotó hacia atrás. Su mente había entrado en un estado de confusión, y sentía como si estuviera viendo estrellas delante de sus ojos. De hecho, le parecía estar viendo toda la galaxia. Sacudió la cabeza confundido mientras caía de cabeza al suelo… Hay que decir que su estado era mucho peor que el de Osa Grande…

Mei Xueyan se recogió furiosamente las mangas y volvió a su habitación.

Jun Moxie se tocó la nariz. No puedo tomar más ventajas ya que no tengo excusa. Además, esto no se ve bien ahora. Después de todo, existe la posibilidad de que esta ‘Jaula del Mundo’ caiga sobre mi cabeza. Por lo tanto, decidió marcharse.

La Reina Serpiente observó el perfil de la espalda de Jun Moxie mientras se alejaba. La expresión de sus ojos sufrió una diminuta fluctuación mientras dejaba escapar un suave suspiro. Había un leve indicio de tristeza en su suspiro…

La Familia Jun finalmente celebró la gran ceremonia de adopción dos días después. Hay que decir que llevaban tiempo preparándose para esta ceremonia.

La ceremonia de adopción de una hija no era algo a lo que se invitaría a tanta gente en días normales. Además, ni siquiera era el anciano Jun Zhantian quien iba a adoptar una hija. En cambio, era Jun Wuyi. Por lo tanto, un gran espectáculo parecía algo extraño.

Sin embargo, el estatus de Guan Qinghan se había vuelto muy sensible en la sociedad. Por otra parte, el caos causado por los eruditos podridos había empeorado las cosas. ¡Por lo tanto, estos eventos habían llevado a la Familia Jun a llevar a cabo esta ceremonia de adopción a una escala que podría considerarse a la par con la ceremonia de fundación de un país!

¡Podría decirse que esta gran cantidad de gente influyente no había llegado ni siquiera cuando Tianxiang se fundó como país!

El Emperador y la Emperatriz vinieron del lado de la Familia Real; incluso los tres príncipes y la princesa también llegaron en persona para felicitar a la Familia Jun. Los señores de todas las familias poderosas de la capital también habían llegado para esta ceremonia. Numerosos funcionarios y oficiales también habían llegado de todo el país…

Además, ¡varias influyentes Familias Xuan también se presentaron!

La Familia Situ, la Familia Sikong, la Familia Baili, la Familia Duanmu… El Maestro de Ceremonias fue anunciando los nombres de estas famosas personalidades. Y, la gente en la multitud sólo podía exclamar… Hay que mencionar que estas personas no eran funcionarios célebres en el mundo secular. Pero, todos ellos eran personalidades renombradas y legendarias. Además, esta gente se había presentado desde todo el país para algo tan trivial como una ceremonia de adopción en la que Jun Wuyi, de la Familia Jun, aceptaba una hija. ¿Qué significaba esto? ¡¿Y qué indicaba esto?!

De repente, hubo un alboroto en la multitud…

“¡El Maestro Feng Juanyun ha llegado aquí para felicitar al Tercer General Jun por adoptar a la Joven Dama Guan como su hija!” A Song Shang se le había confiado el papel de Maestro de Ceremonias. Era un experto en la cima del Xuan Cielo. Sin embargo, su voz normalmente tranquila se había estremecido un poco al anunciar esto. Después de todo, Feng Juanyun era un hombre legendario. Además, había sido nombrado recientemente como Octavo Gran Maestro. Sin embargo, incluso él había llegado aquí en persona…

La sala se quedó en silencio de repente.

Todos los presentes vieron que entraba un hombre vestido con túnica negra. Parecía una espada afilada desenvainada, y tenía una expresión fría y distante en su rostro. Su rostro estaba delineado con líneas suaves y fuertes, y su mirada era tan afilada como un cuchillo. ¡De hecho, la gente sentía como si una espada afilada les atravesara incluso si él simplemente miraba en su dirección!

¡Feng Juanyun!

Jun Wuyi estaba gratamente sorprendido por esto. Y, personalmente salió a darle la bienvenida. Las palabras que Feng Juanyun le había dicho aquel día, cuando estaba en una situación desesperada, todavía resonaban en sus oídos: “¡Jun Wuyi! ¡Beberemos vino y hablaremos libremente si sobrevives a este día! Yo -Feng Juanyun- veo tu tragedia e impotencia. Le deseo buena suerte a la Familia Jun en los días venideros. Pero, ¡debo despedirme por ahora!