Monarca Malvado de Otro Mundo - Volume 4 - OEM - Capítulo 307
Capítulo 307: Las ballestas… ¡Han llegado!
“Pero, deseo ir contigo… Hee hee… seguirte será divertido. No eres muy tranquilo por naturaleza. Entonces, el viaje será muy interesante. ¿Cómo podría ser divertido ir? con mis tres necios hermanos mayores?” Dugu Xiaoyi se dio cuenta al instante de que su ‘truco’ había sido ineficaz. Entonces, descaradamente, recurrió a un nuevo enfoque.
Era claro para Jun Moxie que los tres hermanos de la niña habían rechazado rotundamente su pedido de acompañarlos. Entonces, ella había venido a molestarlo. ¿Por qué más podría ella venir a mí?
“Te lo dije. No va a suceder. No debes involucrarte en este viaje. ¡Así que puedes olvidarte de dejar este lugar!” Era como si el corazón de Jun Moxie estuviera hecho de hierro y piedra. Él no aceptaría; no importa qué. “Acompañarás a mi cuñada en casa. No puedes ir a un lugar así. Será difícil cuidarte. No vamos a salir de excursión.”
“No entiendo cómo me hará compañía… De todos modos, no me acompañará porque voy a Tianfa”, dijo una fría voz. La columna vertebral de Jun Moxie se puso rígida al escuchar esas palabras. Él giró la cabeza para mirar. ¿No era esa Guan Qinghan?
Guan Qinghan tenía la sensación de que algo andaba mal con este asunto de marcha hacia el sur del bosque. No muchas personas sabían sobre sus problemas con la Mansión Xuehun. Pero, la mayoría de las familias influyentes lo sabían; el Palacio Imperial obviamente no fue una excepción.
Y sin embargo, mencionaron que Jun Wuti y Jun Moxie iban a ir… ¿por qué iban a hacer eso?
Jun Wuyi tendría que llevar a las tropas a la batalla. Entonces, eso fue aceptable. Pero, ¿por qué Jun Moxie había sido arrastrado a eso? Esto había preocupado a Guan Qinghan. Y, lo que más le preocupaba era… ¿Qué pasa si el Mansión Xuehun intenta aprovechar esta oportunidad para crear problemas para Jun Wuyi y Jun Moxie? Todo será por mi culpa… ¿Qué debería hacer? ¡La naturaleza de este dúo de tíos y sobrinos empeorará las cosas!]
Estos dos no son tan fuertes. Entonces, ¿cómo van a poder lidiar con la Mansión Xuehun? ¿Habrá algunos problemas? Seguramente habrá un argumento si cualquiera de los dos lados menciona mi nombre. Y, Jun Moxie y Jun Wuyi no retrocederán dada su naturaleza… Entonces, ¿cómo terminaría?
¡Y, Jun Moxie es particularmente intrépido!
¿Hay algo que él no haría?
Por lo tanto, Guan Qinghan había decidido que ella debía ir. Tenía que ir… incluso si eso significaba su muerte. ¡Voy a emprender ese viaje por mi cuenta si te niegas a llevarme contigo!
Todos regresarían seguros si todo salía bien.
Sin embargo, Guan Qinghan siempre podría usarse como moneda de cambio si surgiera algún problema. Ella preferiría sacrificar su vida por el regreso seguro de Jun Moxie y Jun Wuyi. Sin embargo, no podía permitir que el dúo tío-sobrino se enterara de sus intenciones. Si supieran de sus intenciones… preferirían romperle las piernas para que no pudiera ir. Su tío tercero no era muy probable que tomara esta acción. Pero, ella era muy consciente de la naturaleza nefasta de su cuñado. Sabía que Jun Moxie era perfectamente capaz de confinarla.
Guan Qinghan era perfectamente consciente de ese punto.
“¿Qué está sucediendo hoy, ah! Mi cuñada… mi propia cuñada ha venido a sumarse a este caos… ¿por qué todos vinieron a verme…? Mira, no puedo lidiar con esto…” Jun Moxie agarró su pelo. Parecía como si se hubiera vuelto loco, “No vengas a mí si deseas ir a Tianfa. Ya he dicho que no… ¡Entonces, ve con el Tío Tercero!”
“Tu decisión en este asunto es asunto tuyo. ¡Pero si voy o no, es mío!” Guan Qinghan miró sin entusiasmo a Jun Moxie. Luego, ella tiró rápidamente de Dugu Xiaoyi y se fue sin consultar a nadie. Sin embargo, Dugu Xiaoyi hizo un gesto hacia Jun Moxie con los ojos para demostrar su protesta cuando se fue.
Su pensamiento detrás de este gesto de protesta fue simple, Seré amable siempre y cuando no me causes problemas, y me ames.
La boca de Jun Moxie se torció irónicamente.
En la tarde del mismo día, Jun Moxie y sus más de doscientos guardias imperiales se dividieron en grupos y desaparecieron de la residencia de la Familia Jun.
Más tarde aquella noche…
El cuerpo alto del Abuelo Jun estaba firme en su patio. Le dijo algo a las diez figuras sombrías que se encontraban frente a él. Luego, las diez figuras se dispersaron y desaparecieron del patio sin dejar rastro.
El Abuelo Jun suspiró y le preguntó al Viejo Pang, que estaba a su lado, “¿Cuándo llegaran…?”
El Biejo Pang pensó por un momento y respondió: “Aproximadamente mañana por la tarde”.
“Hmm…” el Viejo frunció el ceño y habló: “Viejo Pang, prepara las mascarillas y la ropa oscura.”
Los ojos del viejo Pang brillaron con alegria.
Jun Wuyi estaba dentro de su pequeño patio. El Tercer Maestro había roto un trozo de papel entre sus manos. Él se rió entre dientes y murmuró: “Mañana por la tarde…”
Las cortinas de la noche descendieron y ascendieron. El sol de la mañana se elevó en el cielo y luego volvió a ponerse. Pronto, era tarde…
La luna ya estaba elevándose después de que el sol se había puesto. El tiempo pasó en un instante. Zhou Wuji había olvidado cuántas veces había levantado su látigo para acelerar su caballo. Habían pasado dos mañanas desde que dejó su barco y había desembarcado. Y, habían sido dos días completos de prisa.
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