Monarca de la Noche Eterna - Volume 1 - MEN - Capítulo 81

Los pocos clientes que había dentro de la tienda notaron inmediatamente los claros signos de desgaste de las piezas con solo un vistazo y perdieron interés. Miraron a Qianye, con desdén en sus miradas.

Un joven soldado examinó las armas de origen en el mostrador e inmediatamente dijo: “Mierda, ¿qué clase de tienda de mierda es esta? ¡Aquí ni siquiera hay un arma de grado dos!”.

El rostro del Viejo 1 se oscureció inmediatamente y señaló la bolsa de lona raída frente a Qianye. “¡Tengo mejores cosas que armas de grado dos!”.

Los pocos soldados que estaban examinando la tienda miraron entre la bolsa de lona y las piezas desgastadas en las manos de Qianye. Empezaron a reírse y a suponer que la pobreza había vuelto loco al anciano.

Después de que esas personas se fueran, una sonrisa fría apareció en la comisura de la boca de Qianye.

Estas piezas eran en realidad casi nuevas, el Viejo 1 simplemente había utilizado un método especial para que parecieran viejas. El cuerpo del Tiro al Blanco era nuevo en un setenta por ciento, y algunas de sus partes importantes eran nuevas en un ochenta por ciento. Solo estas pocas piezas elevarían la precisión del Tiro al Blanco a un nuevo nivel.

Los soldados que acababan de irse probablemente no verían un Tiro al Blanco en toda su vida, así que, por supuesto, no reconocerían estas piezas especiales. En comparación, Qianye había aprendido a usar todas las armas estándar del Imperio, a mantenerlas y a conocer el funcionamiento de su estructura interna. El campamento de Qianye había incluido en su plan de estudios casi todas las armas por debajo del grado cinco, por lo que, aunque la Aguja Escorpión en manos de un soldado Escorpión Rojo fuera destruida, serían capaces de coger cualquier arma de la raza oscura y usarla inmediatamente.

Qianye inspeccionó los componentes del Tiro al Blanco uno por uno. Mientras lo hacía, el Viejo 1 se volvía cada vez más extraño.

Después de que Qianye colocara el último componente en su bolsa y la cerrara, el Viejo 1 finalmente no pudo evitar preguntar: “¿No vas a montarlo y probarlo tú mismo?”.

“Todas las piezas están aquí, así que no es necesario que lo monte”. Qianye se echó la bolsa de lona a la espalda y la cargó.

Los ojos del Viejo 1 brillaron mientras decía con cuidado: “El número de los que han visto un Tiro al Blanco ya es bastante pequeño. Los que entienden cómo funciona su estructura interna son aún menos”.

“Las personas que pueden hacer un Tiro al Blanco también son muy raras, ¿verdad?”.

Ambos hombres, joven y viejo, se miraron fijamente durante un rato, y luego Qianye se fue.

De vuelta al pequeño hotel en el que se alojaba, Qianye pidió algo de comida y se la comió. Luego volvió a cambiar de apariencia y comenzó a montar el Tiro al Blanco.

Al poco tiempo, Qianye tenía en sus manos un rifle de francotirador de dos metros de largo.

Qianye canalizó un poco de su poder de origen en el arma, pero su cuerpo oscuro no brillaba ni con un atisbo de luz reflejada. A pesar de ello, podía sentir cómo el poder de origen aumentaba dentro del componente de condensación de energía. Solo cuando uno miraba fijamente el cañón del arma podía ver un haz de luz verde en el interior. Ni el más mínimo atisbo de luz se filtraba por él. ¡Era un arma realmente letal! Qianye estaba muy satisfecho con ella.

La noche era oscura, pero la ciudad de Sangre Oscura seguía muy animada. En esta ciudad, la gente buscaba diversión y emociones fuertes en cualquier momento. Soldados, cazadores y aventureros caminaban en la línea entre la vida y la muerte a cada momento de cada día, sin saber si vivirían hasta el día siguiente. A esta gente le encantaba dejarse llevar.

En esta ciudad, los soldados expedicionarios tenían un estatus no muy superior al de los cazadores. A pesar del temible poder del ejército expedicionario, la era militar ya había terminado. Los principales cuerpos de ejército estaban ahora por su cuenta, y existían facciones por todas partes,

Qianye usó un paño para cubrir el Tiro al Blanco y lo llevó a la espalda antes de salir del hotel. Rápidamente se mezcló con la noche de Ciudad Sangre Oscura, convirtiéndose en uno de los millones de personas que se movían.

Al cabo de un momento, Qianye llegó junto al patio de la banda de la Serpiente del Cielo. Rodeó en silencio el patio y trepó por el lateral de un gran edificio. Este edificio tenía veinte pisos y parecía sucio y negro, obviamente abandonado. Innumerables familias estaban hacinadas dentro de este edificio, cada uno de los pequeños apartamentos abarrotados con siete u ocho personas.

Había basura por todas partes en el edificio, junto con agua sucia y objetos diversos. Qianye subió las escaleras, pateando a un cadáver en descomposición hasta dejar inconsciente a un borracho antes de llegar al último piso. Qianye miró a través de una ventana rota hacia una habitación, buscando un punto de observación adecuado antes de entrar.

Era una habitación pequeña con dos camas de estilo militar que ocupaban la mayor parte del espacio interior. Dentro había cuatro personas, dos mujeres y dos hombres. En el momento en que Qianye irrumpió, una pareja estaba dormida en una cama. Los otros dos estaban abrazados en la otra, haciendo el amor intensamente. Cuando el hombre vio a Qianye, se llenó de conmoción y soltó a la mujer, temblando.

Bajo la amenaza de la boca de un arma negra, los cuatro dejaron obedientemente que Qianye los atara antes de que se agachara en un rincón. Las dos mujeres casi desnudas se retorcían, tratando de frotarse contra el muslo de Qianye.

Sin embargo, Qianye solo sentía repulsión por sus cuerpos. Era completamente indiferente a estos cuerpos que no se habían lavado en meses. Empujó el Tiro al Blanco contra sus pechos blancos como la nieve pero flácidos y los apartó. Como si la larga varilla de metal que era el cañón del Tiro al Blanco no fuera el tipo de varilla que buscaban, las mujeres temblaron y se retiraron a un lado, obedientemente quietas.

El espeso aroma del sexo permanecía en la habitación, flotando en el aire y mezclándose con un hedor que provenía de años sin luz solar y algunos otros olores extraños e irreconocibles.

Qianye, sin embargo, estaba extremadamente satisfecho con este lugar. Un hedor tan espeso ocultaba por completo su propio olor. Por lo tanto, incluso si el enemigo encontraba este lugar, no podría utilizarlo para rastrearlo, eliminando una posible pista.