Monarca de la Noche Eterna - Volume 1 - MEN Volumen 1: Capítulo 22

Volumen 1: Capítulo 22 – Viaje a Través de los Cielos

“¡Ver quién puede beber más, por supuesto!”

Wei Potian golpeo sus manos con un aire muy confiado.

Pasos venían de las escaleras cuando una docena de hermosas chicas se acercaron, cada una de ellas abrazando una botella de licor. Sólo viendo esos exquisitos envases, uno podría decir que eran todos de alto grado.

Wei Potian cogió dos botellas y les rompió el cuello. Pasando uno a Qianye, dijo, “¡Tomemos media botella primero! ¿Qué tal? ¿Te atreves?”

Qianye tomó la botella, su expresión parecía extremadamente complicada.

En silencio, metió media botella en su vaso y luego comenzó fruncir lentamente los labios.

Sin embargo, delante de Wei Potian había un cuenco ancho. Echando hacia atrás la cabeza, el cuenco de licor ya caía en su estómago. La mitad de una botella se habría ido si bebía otro tazón. Qianye simplemente había tomado algunos sorbos hasta este punto, que era a lo sumo la cantidad de un vaso.

“Bueno, primero voy a beber esta botella. Puedes ir despacio, no hay necesidad de apresurarse. ¡Puedo esperar!” Dijo Wei Potian de una manera imponente. Volvió a echar la cabeza por segunda vez y luego a la tercera, la primera botella de licor se había ido así como así.

Qianye finalmente había terminado dos tazas para entonces. Sin embargo, su rostro ya estaba enrojecido, e incluso su visión se volvió algo borrosa. Si bebía un poco más, sin duda se caería por debajo de la mesa.

¡Wei Potian finalmente se sintió emocionado!

Aunque no podía vencer a este chico en la arena, bebiendo de bajo la mesa era lo mismo, ¿No? Wei Potian no se sentía como si se consolara a sí mismo mientras pensaba esto.

Qianye bebió lentamente, incluso apoyándose con los codos contra la mesa. Sosteniendo el vaso, empezó a tambalearse al borde del colapso. Sin embargo, se mantuvo en el borde hasta que había bebido toda la botella de vidrio.

“¡Tienes agallas!” Exclamó Wei Potian en alabanza, luego miró malignamente el licor fuerte que se calentaba por el abrazo de las hermosas chicas.

Al cabo de poco tiempo, otra botella vacía apareció ante Wei Potian mientras Qianye seguía bebiendo lentamente, tambaleándose como de costumbre.

En este momento, los ojos de Wei Potian ya se estaban poniendo en blanco, y su discurso también había comenzado a volverse lentamente incoherente. Sin embargo, Wei Potian inmediatamente abrió otras dos botellas de licor cuando vio que Qianye había terminado de beber. Tomó la iniciativa, echando atrás la cabeza repetidamente y bajando una botella sin pausa.

Mientras tanto, Qianye era el mismo de siempre, parecía que se caería de la mesa en cualquier segundo. Muchas personas entrometidas estaban actualmente en el bar, de pie alrededor de ellos en un círculo como espectadores. Mientras observaban a Qianye, sus miradas iniciales que habían estado llenas de burla se volvieron extrañas.

El licor que bebían era el tequila que había sido destilado en la provincia extremadamente fría del Llano Oeste. Su fuerza podría ser clasificada entre las tres primeras de las famosas bebidas alcohólicas del Imperio. Por lo general se mezclaba en cócteles, e incluso si alguien los bebiera claramente, no sería en cantidades tan enormes. Los hombres que podían soportar dos botellas grandes y todavía permanecer parados eran definitivamente raros de ver.

Sentado en la mesa una hora más tarde, Qianye miró las botellas vacías de licor que estaban esparcidas, y luego miró a Wei Potian y Shi Yan que estaban inconscientes encima de él. Qianye no podía recordar cuándo habían caído.

Esto fue especialmente el caso de Shi Yan. ¿Cómo fue eliminado? ¡Esta competencia de beber no tuvo nada que ver con él!

Qianye se frotó la frente y poco a poco comenzó a recordar lo que había sucedido. Aunque Qianye no sabía cuándo, Wei Potian, cuya cabeza ya estaba confundido de beber, de repente se burló de Shi Yan.

En realidad, Shi Yan también tenía un temperamento ardiente y, naturalmente, no sería amable con Wei Potian, uniéndose a la batalla sin dudarlo. El encuentro de uno contra uno se convirtió de repente en una guerra de tres reinos, y luego Wei Potian y Shi Yan fueron derrotados por Qianye.

Qianye estaba al borde del colapso. Sin embargo, era sólo el borde, por lo que nadie sabía lo cerca que estaba del colapso real.

Después de recordar la secuencia de los acontecimientos, Qianye forzó una sonrisa. ¿Qué iba a hacer con estos muertos parecidos a cerdos? Al final, Qianye no tuvo más remedio que agarrar uno con cualquier mano mientras se tambaleaba hacia el hotel. En realidad, se las arregló para regresar milagrosamente a su habitación sin tropezar.

Qianye reservó otra habitación y arrojó a los dos hombres a la cama, tirándolos sin piedad antes de que finalmente se tambalearan a su propia habitación. Cayó en su cama, cayendo profundamente dormido.

Qianye no había dormido mucho tiempo cuando se sentó en su cama, mirando a los alrededores. Le dolía la cabeza un poco; La sensación de estar resacado no había desaparecido por completo.

Solo había pasado cinco horas, pero el cielo ni siquiera empezaba a brillar. Sin embargo, en el campamento de entrenamiento, ya era hora de levantarse y comenzar el entrenamiento del día. El estilo de vida repetitivo ya había formado una reacción instintiva en el cuerpo de Qianye.

Qianye se levantó y se duchó, pero de repente no supo qué hacer.

De vez en cuando se sentía así desde que se graduó del Campamento de Entrenamiento del Manantial Amarillo. El horario que originalmente estaba lleno hasta el límite y la presión para sobrevivir que había existido en cada momento había desaparecido repentinamente. Grandes extensiones de tiempo libre eran ahora suyas para hacer lo que quisiera, sin embargo, se sentía poco familiar para Qianye.

En silencio practicó algunas técnicas de combate por un tiempo, mientras el rayo del amanecer brillaba en su habitación.

Shi Yan finalmente apareció al mediodía. Cuando este soldado que no sabía sonreír vio a Qianye, su rostro se volvió en un rojo raramente visto.

En cuanto a Wei Potian, había desaparecido en secreto hace mucho tiempo. ¿Qué cara tenía para reunirse con Qianye? Sin embargo, mantuvo su promesa y dejó su cinturón, añadiendo una nota que indicaba su renuencia a darse por vencido. Sólo había cuatro palabras grandes en la nota ‘¡Vamos a luchar de nuevo algún día!’

¡Oh, también había un enorme signo de exclamación!

Qianye no tomó realmente esta nota en el corazón mientras la envolvió y la arrojó a una papelera. Siempre que Qianye recordaba por qué Wei Potian lo provocó la primera vez, él sentiría el impulso de golpearlo un poco más.

Sin embargo, después de que Shi Yan explicó los antecedentes de la Familia Wei, Qianye pensó en ello. Luego tomo el collar, el brazalete y el cinturón, y los mandó a alguien que los enviara a donde vivía Wei Potian. También había una nota adentro con ocho palabras grandes en él, paga las tres deudas antes de que luchemos otra vez.

Después del almuerzo, Shi Yan envió a Qianye de vuelta al cuartel interior y lo entregó al soldado de mediana edad.