Kage no Jitsuryokusha ni Naritakute! - Volume 5 - KJN – Capítulo 105
Ahí estaba la sala del tesoro de un vampiro progenitor.
Estaba enterrado tan literalmente en un tesoro que tiemblo de emoción.
Pero cuando escudriño los montones, yendo con un “ooh esto es bueno”, “ooh esto también es bueno”, me doy cuenta de que estoy extremadamente limitado en lo que puedo cargar de vuelta.
Básicamente, no tengo ninguna capacidad para valorar obras de arte, así que tendré que dejarlas. Desafortunadamente, la mayoría de lo que hay en el lugar entra en esa categoría.
Después están las joyas y los metales preciosos. Las piezas pequeñas están bien, pero las más grandes son voluminosas. Y tampoco puedo venderlos.
Por lo tanto, mi objetivo se ha reducido a una sola opción.
El que es más seguro y más eficiente en la adición a mis propios fondos, lo que es más lo necesito para agarrar―― las monedas de oro.
Una pieza del tamaño de una moneda de 500 yenes vale 100 mil Zeny. Es más, puedo usarlo como está.
Es la opción que cuenta con más eficiencia y confiabilidad en una abrumadora comparación con todas las demás.
Qué hecho más desalentador me fue revelado mientras miraba de cerca todo este tesoro.
[Paris_117 ok… valla que le falta la previcion… ¿Dónde está esa magia espacial de almacenamiento cuando se le necesita?]
“Bueno, es la realidad para ti, supongo…” Murmuró en voz baja como si fuera a decir adiós a la enorme variedad de tesoros que tengo ante mí. Luego me dedico a la tarea de recoger monedas de oro.
Naturalmente, ya he pensado en cómo lo llevaré todo.
Tomando en referencia a la autoridad en trajes corporales de slime, Epsilon, he decidido meter las monedas de oro en mi traje corporal. Así como Epsilon rellena el suyo con slime, yo rellenaré el mío con monedas de oro.
[Paris_117 jo… pobre chica… y ella que lo hace para impresionarte…]
Dentro de mi traje, mi abrigo largo, e incluso mi capucha, cubro todo el espacio disponible con monedas de oro, sin dejar ningún parche al descubierto.
No, eso es mentira. Todavía tengo la mente para mantener las áreas de unión sin recubrimiento.
Aún así, la cantidad final que puedo rellanar es ligeramente superior a 1.000 piezas.
Mil piezas de monedas de oro, que se calculan a 100 millones de Zeny. No creo que mis matemáticas estén equivocadas.
Tengo la intención de vivir 300 años, así que no es suficiente.
Pero el rellenarlo más introduciría un riesgo ineludible.
Mi magia es suficiente para compensar el peso de mil monedas de oro, pero es difícil moverse cómodamente. Más que esto, mis movimientos se pondrían rígidos.
Además, mil monedas de oro todavía no son tan llamativas desde el punto de vista de la apariencia. Pero si voy por, digamos, 2.000, entonces eso sería bastante obvio.
“Estaría bien que simplemente me las llevara, pero…”
La batalla del jefe con la Reina de Sangre aún estaba por delante de mí.
Aparentemente la Reina de Sangre era un vampiro progenitor.
Definitivamente será fuerte, no hay dudas.
Un vampiro que es un progenitor, sí que debe ser fuerte.
Por lo tanto, el plan de batalla de esta vez ya ha sido decidido.
Hasta ahora, siempre he sido el último en aparecer. Pero esta vez, el oponente es alguien con el título de «vampiro progenitor», así que he decidido ser el primero.
Entonces, en medio de mi combate con el vampiro progenitor, el protagonista puede aparecer y decir: “¡¿Qué pasa con esta terrible batalla de alto nivel? ¡No puedo seguirlos en absoluto!” En estado de shock.
Ese es el mejor camino para que esta vez todo salga bien.
Y entonces, es necesario que yo sea el primero en encontrar a la Reina de Sangre. Cuanto más me demore, mayor será la posibilidad de que otra persona me gane.
Por ahora, coloco las monedas de oro en la puerta de la sala del tesoro.
“Regresemos a buscarlas después.”
Para que sea rápido y fácil retroceder cuando el evento termine, o en caso de que ocurra algo inesperado.
Después de pronunciar una breve oración para poder recuperarlas con seguridad, me apresuro a subir a la cima de la torre con mi velocidad máxima, la que no he usado en mucho tiempo. Llegar temprano siempre es mejor que llegar tarde.
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“Por fin ha llegado el momento…” Murmuro Crimson con una sonrisa de locura en su rostro.
El sacrificio había sido preparado, y la luna estaba manchada de un carmesí profundo.
Ha llegado el momento de revivir a Elizabeth la Reina de Sangre.
Crimson puso una mano sobre el gran ataúd que se encontraba en el centro de la habitación, y luego, lentamente, le quito la tapa.
Con eso, interior del ataúd fue revelado.
Pero lo único que había dentro era una masa negra y seca. La figura de Elizabeth la Reina de Sangre no podía ser vista por ninguna parte.
Crimson cuidadosamente coloco la masa negra en sus manos y la levanto con devoción.
“Ha pasado mucho tiempo, oh mi Reina de la Sangre… Los preparativos para empapar de sangre al mundo están en su lugar….”
Mirándolo mas de cerca se podía apreciar que esa masa negra era un órgano.
Un corazón seco.
Después de mil años transcurridos, todo lo que queda era el corazón de un progenitor.
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