Guerrero Sangre de Dragón - Volume 7 - DBW – Vol 7 Capítulo 4

Volumen 7 – Capitulo 4

Cristales de energía

Parte 1

Aiwa no vio ninguna esperanza, tuvo que salir de la habitación, se paseó por la base.

De hecho, no hay diferencia entre dentro o fuera de la base, porque aquí no hace falta ni siquiera una pared, es sólo un campo.

El único signo que puede dar señales de exigir vida aquí es el molino de viento, y estas casas como la pocilga.

Sin embargo, no se sabe qué tipo de acrobacias utilizó Carter para construir las casas, que, mientras se mira rudimentaria, durmió en ella sin sentir frío en absoluto.

Hay una gran diferencia de temperatura entre el día y la noche aquí.

Caminando fuera, Aiwa sintió que el aire de temprano en la mañana era un poco amargo, además de que no había comido, el tipo de frío es aún más mortal.

Como sucedió, vio a Xina haciendo ejercicios matutinos, y su figura grácil se convirtió en un punto brillante en el campo.

– Oficial Xina, ¡Buenos días! Aiwa corrió con entusiasmo hacia Xina.

– Tan temprano – Dijo Xina retorciendo su cuerpo, mientras se volteaba. Cuando se flexionaba o sacudía el cuerpo, los pechos rechonchos casi salen de su delgado uniforme militar. Aiwa puede ver que Xina no sólo es guapa, el cuerpo también tiene una especie de tabú, sin timidez Aiwa observa todo con ojos lascivos. Cada vez que hacía el ejercicio de ampliación de senos, Aiwa podía ver la seductora Blanca nieves en su pecho desde el medio de sus dos botones.

Cuando Aiwa se fijo el medio de sus dos botones, su corazón no puede evitar golpear rápidamente subiendo escalas de latidos hacia arriba. Sin contar a Ainy, en todo el campamento sólo existe esta mujer, si es incluso fea, provocaría en un hombre una erección, ¡por no hablar de que todavía tiene una especie de encanto!

– ¡Oficial Xina, eres tan hermosa! Usted me pregunta, ¿tan temprano? Es que tengo tanta hambre desde temprano que el estomago me ladra, y no logro conciliar el sueño.

– Su cena Tony lo ha tomado para usted, ¿no se la comió ya? – Al ver a Aiwa así, Xina pensó que era un alborotador al que le gustaba molestar.

– ¿Lo tomo Tony? Oh, no lo sabía, de todas formas ¿Cuándo es la comida de la mañana? – Aiwa respondió, mientras se sincronizaba con el ejercicio matutino de Xina.

– ¿El desayuno? Aquí sólo una comida al día, ayer le di la cantidad de un día. Vuelve y pregúntale a Tony. Tal vez se le olvidó decirte dónde lo puso.

Como la única mujer en la base, Xina no sintió rara la mirada envidiosa, algo obscena, y el cumplido inútil de Aiwa.

La blusa de Xina estaba firmemente envuelta en sus inquietos pechos, que parecían saltar alegremente cuando ella se movía y los pezones del acantilado salieron de debajo de su ropa, como dos brotes de frijol que estaban a punto de ser arqueados fuera de la tierra.

– ¡Hey, no hay prisa, me gustaría hacer ejercicios de la mañana con el hermoso oficial de logística! – Los ojos de Aiwa nunca dejaron el pecho de Xina, como si mirarla a sus dos pechos lo llenara.

Xina tampoco insistió más y comenzó a correr junto con Aiwa, con cada paso de la carrera, sus pechos rechonchos y pálidos se agitaban.

Aiwa concluyó que bajo la camiseta, Xina definitivamente no llevaba sujetador, al menos no ahora.

Sólo los pechos que no llevan sostenes serán tan libres y arrogantes.

Cuando Aiwa siguió a Xina, muchos madrugadores también tenían un aspecto envidioso, y aunque el estomago de Aiwa está constantemente ladrando, su corazón está muy orgulloso, y constantemente saludaba a aquellos que le ponen una mirada celosa.

Xina y Aiwa corrían en dirección opuesta al cuartel terminando más y más lejos, en un descenso, no se sabe si por descuido o de manera intencional, Xina tropezó un poco, su cuerpo de repente se inclinó hacia adelante.

Aiwa, que había estado trotando a su lado, inteligentemente estiró una mano y le enganchó la cintura esbelta.

El cuerpo de Xina terminó en los brazos de Aiwa, sus pechos rechonchos se atascaron entre los dos, sus pezones blancos como la nieve han sido expulsados fuera del escote.

Ambas personas están muy cerca, Xina ha sentido claramente el gran tipo duro en la entrepierna de Aiwa en su pequeño abdomen.

– Usted no está tratando de tomar ventaja de un oficial de servicio de la base en un intento de violación ¿no? – Los ojos de Xina mostraron un indicio de burla, cualquier muchacho ensangrentado no puede soportar esta provocación, especialmente con el leve aroma de su dulce aliento, los nervios del petulante Aiwa han sido excitados. Las esquinas de su boca eran un sorbo, y los sentimientos amorosos infinitos se derramaban.

– No tengo las agallas para violar a un oficial, pero si un oficial tan hermoso quiere que le masajee un par de veces, estaré encantado de ayudar–. Aiwa también miró a los ojos encantadores de Xina, chupando el tenue aroma de sus labios.

En tal base, las mujeres ya son especies raras, ¡por no hablar de hermosas mujeres!

Sus grandes manos se vieron tentadas a deslizarse por la cintura de Xina y acariciar sus nalgas rechonchas hacia arriba.

– Siento que un poco de insectos sube por mis pantalones, y usted… ¡Revise por mí! ¡Ya sabes, las chicas tienen miedo de ese tipo de bichos peludos! – Justo ahora la cara orgullosa de Xina de repente se volvió suave, su voz es también un poco temblorosa.

Pero Aiwa está seguro de que no le ha arrojado ningún tipo de hechizo Dou.

Parece que en tal base de entrenamiento, el hambre sexual no sólo se limita a los hombres, sino que las mujeres tampoco pueden soportarlo.

– No importa, tengo un gran insecto, con sólo poner mi gran insecto en sus pantalones, se puede comer ese pequeño insecto.

El corazón de Aiwa saltó rápidamente, sus grandes y poderosas manos se dirigieron a la solapa en la cadera de Xina, su cabeza también se inclinó, listo para besar esos sexis labios.