Época Crepuscular - Volume 1 - EOT - Capìtulo 88

Capítulo 88 – Coerción

“93 de la calle Jiangbei, ¡mi antigua compañía estaba cerca de allí!” La mujer continuó.

“Creo que está allí también. Solía ​​estar abierto durante bastante tiempo la última vez, recuerdo visitarlo una vez.” Un hombre habló.

“No está lejos de aquí. Caminemos a lo largo de la carretera hacia el este hasta llegar a la intersección norte, que es donde está la calle Jiangbei. Está a solo unos pocos kilómetros de distancia, ¡vámonos ahora!” Dijo un hombre regordete con convicción.

Sin embargo, nadie se molestó, todos miraban a Luo Yuan. El hombre notablemente se sintió incomodo al ser ignorado.

Tal vez ese hombre pudo haber sido gerente o jefe antes, pero en momentos como este, a nadie le importaba cuán rico e influyente solía ser.

Mientras tanto Luo Yuan no había mostrado ningún poder extraordinario en el camino, pero había estado excepcionalmente calmado durante la carrera de media hora, tirando de las dos chicas junto con él sin mostrar pánico incluso cuando las bestias mutadas acechaban cerca.

Podía sentir que todos lo miraban. Luo Yuan, después de guardar silencio por un tiempo, habló. “Dado que el refugio está cerca, deberíamos ir allí. ¡Deberíamos irnos después de un descanso de diez minutos!”

Todos se sentaron en silencio. El hombre regordete que había hablado antes se sentó junto a Wang Shishi, con una sonrisa feliz “Soy Huo Dong, ¿cómo me dirijo a ti, hermano?”

Wang Shishi se acercó más a Luo Yuan con desprecio hacia ese hombre.

Luo Yuan tocó ligeramente su mano, se volteó hacia él y dijo. “¡Llámame Luo Yuan!”

Huo Dong luego continuó: “¡Qué joven tan bueno eres, Hermano Luo! Si fuese la antigüedad, definitivamente habrías sido un valiente guerrero. ¡Definitivamente te convertirás en alguien genial algún día!” Luego miró a Wang Shishi y alabó “¡Incluso tu hermana menor es tan bella, y su futuro esposo será un hombre afortunado!”

La cara de Wang Shishi se sonrojó, echando un vistazo a Luo Yuan mientras respondía con una sonrisa “No soy su hermana menor.”

Sería una conversación interminable una vez que respondiese a ese tipo de personas; las palabras de adulación y dulces eran algo natural para ellos. De hecho, Huo Dong continuó con su conversación, “Disculpa mi mala vista. Entonces debes ser su novia. Solo el Hermano Luo podría igualar la belleza de esta dama. Esa belleza también debe ser tu novia. Hermano Luo, ¡eres muy afortunado!”

Luo Yuan lo miró con una sonrisa hasta que el hombre se quedó riendo.

“Uff, no puedo estar tan tranquilo y sereno como tu hermano Luo. Ríete de mí todo lo que quieras, pero temblaré incontrolablemente si no distraigo mi atención hablando.” Huo Dong levantó la cabeza y sollozó antes de decir desesperadamente: “Tengo miedo de no vivir para ver el sol de mañana, incluso si tuviese que sobrevivir esta noche. Podría morir en el próximo segundo. Incluso si logramos llegar al refugio, no va a ser seguro por mucho tiempo ahora que el ejército se ha ido y la Ciudad Hedong está infestada de bestias mutadas. Además de no tener comida, es posible que ni siquiera encontremos agua limpia. Solo terminaremos muriéndonos de hambre si no podemos encontrar armas para matar a las bestias mutiladas.”

Su voz áspera resonó en el estacionamiento del sótano, oprimiendo la atmósfera y algunas personas comenzaron a sollozar en silencio.

“¡Los militares estaban retrocediendo a toda prisa, debe haber algunas armas en el campo de batalla!” Sugirió alguien.

“Claro, podría haber muchas armas allí, pero ¿quién se atrevería a acercarse a un lugar tan peligroso? Incluso si logramos ponerles las manos encima, ¿a cuántas personas habríamos sacrificado?” Replicó Huo Dong.

“¿Por qué ignorar lo que está cerca? La fábrica militar está en el área industrial. Debe haber un montón de armas de fuego e incluso cañones allí. Las Fuerzas Armadas del Pueblo también se encuentran cerca. Está lleno de armas obsoletas que no estaban a la altura de las normas militares. Debe haber toneladas allí ahora.”

El equipo partió esa noche.

La calle ahora estaba vacía, su superficie manchada de sangre. Una pierna delgada, probablemente de una mujer joven, se podía ver tendida en el camino, retorciéndose de vez en cuando, aunque su dueña no estaba en ninguna parte.

El penetrante hedor a sangre de cobre en el aire irritaba la nariz de todos; algunos de ellos tuvieron que parar para vomitar.

La cara de Luo Yuan se había puesto ligeramente pálida; sentía náuseas a pesar de estar acostumbrado a escenas como esas.

Unos minutos más tarde, Luo Yuan se detuvo. Algo grande yacía junto a la carretera a varios cientos de metros frente a él. Por su figura, era un ciempiés de unos 5 a 6 metros de largo con una corteza dorada amarillento. Sus piernas brillaban bajo la luz de la luna, cubriendo los costados de su cuerpo. Descansaba silenciosamente con un estómago abultado; algo parecía estar todavía retorciéndose debajo de él.

Esa era una bestia mutada e hinchada. Aparte de los humanos que podía encontrar en la ciudad, no había nada más de lo que pudiese darse un banquete.

Pensando en lo que podría haber estado dentro de ese cuerpo hinchado; Luo Yuan sostuvo firmemente su espada y aumentó su velocidad.