El Viaje de un Mortal hacia la Inmortalidad - Volume 11 - RMJI - Capítulo 2438

Capítulo 2438: Plomos

“Ya veo. Sin embargo, todavía me gustaría intentarlo. Sin embargo, antes de eso, quiero intentar usar una técnica de búsqueda de alma en este verdadero inmortal; estoy seguro de que no tendrías ninguna objeción, ¿verdad, Hermano Espíritu?”. preguntó Han Li mientras se acariciaba la barbilla en actitud contemplativa.

El Monarca Espíritu vaciló un poco al oír esto antes de responder: “Si eres capaz de matar a este cerdo de inmediato, entonces estaría más que feliz de verlo. Sin embargo, a menos que tu sentido espiritual sea mucho más poderoso que el suyo, no hay forma de que seas capaz de registrar su alma con éxito.”

Las cejas de Han Li se fruncieron ligeramente al oír esto. “¿Oh? ¿Entonces qué pasa si insisto en intentarlo?”.

La expresión del Monarca Espíritu cambió drásticamente al oír esto.

Una mirada fría apareció entonces en su rostro mientras decía: “Si estás tan confiado, entonces no te detendré. Sin embargo, sellé a este inmortal; si insistes en hacer las cosas por la fuerza, entonces tendrás que probarte ante mí primero.”

“¿Cómo quieres que lo haga?” Han Li preguntó.

“Hay mucha gente que proclama que eres el ser número uno de la Etapa de Gran Ascensión en el Reino Espiritual. Me atrevería a decir que yo también soy bastante poderoso entre los seres de la Etapa de Gran Ascensión; si puedes resistir tres ataques míos sin evadirlos, entonces puedo permitirte que le hagas lo que quieras a este inmortal”, dijo el Monarca Espíritu.

“Jaja, eso me viene muy bien. Entre cultivadores como nosotros, el poder debe venerarse por encima de todo. Si no puedo resistir tres ataques tuyos, me iré enseguida y no volveré a hacer mención de esto”, dijo Han Li.

“En ese caso, vayamos a otro lugar para no dañar el sello de aquí”, propuso el Monarca Espíritu.

“Como quieras”, respondió Han Li con un gesto de cabeza.

Así, el Monarca Espíritu salió volando de la sala como un rayo de luz, seguido de cerca por Han Li.

Unos 15 minutos más tarde, dos violentos temblores surgieron de un punto determinado del vientre de la Montaña del Espíritu Oculto, provocando que toda la montaña temblara y se estremeciera.

Todos los guardias de la Raza Espíritu no pudieron evitar intercambiar miradas alarmadas al percibir esto.

Sabían que esto tenía que tener algo que ver con Han Li, pero no tenían ni idea de lo que estaba pasando exactamente, y no se atrevían a investigar sin el permiso del Monarca Espíritu.

……

Dentro de una sala en el vientre de la Montaña del Espíritu Oculto, una barrera de luz que envolvía toda la sala de repente se desintegró en motas de luz blanca.

Han Li y el Monarca Espíritu se enfrentaban desde extremos opuestos de la sala con expresiones muy contrastadas.

Han Li tenía las manos entrelazadas a la espalda con expresión despreocupada, como si estuviera dando un paseo por el parque.

En contraste, el aura del Monarca Espíritu se había vuelto aún más poderosa que antes, y había una Proyección de Buda plateada detrás de él con ojos demoníacos por todo el cuerpo, pero su expresión era bastante tensa. Había un círculo de espadas cortas translúcidas a su alrededor, pero parecían haberle evitado intencionadamente.

Entre los dos había una hoja gigante de más de 30 metros de longitud, suspendida en el aire, pero a la que le faltaba la punta. Además, la sección transversal de la incisión era tan lisa como un espejo, como si la punta hubiera sido cortada limpiamente por algo.

“Ya has hecho dos ataques; aún queda uno”, dijo Han Li sin prisa.

“Olvídalo. Tus poderes son aún más temibles de lo que sugieren los rumores; sólo estaría acumulando más vergüenza sobre mí mismo si fuera a desatar un ataque final”, dijo el Monarca Espíritu con una sonrisa irónica.

Entonces hizo un sello con la mano, y la gigantesca hoja negra desapareció inmediatamente junto a la proyección plateada de Buda y las hojas cortas translúcidas.

“Jeje, eres demasiado modesto, Hermano Espíritu; estoy seguro de que no desataste tus ataques más poderosos. De lo contrario, no habría podido resistirlos tan fácilmente”, se rió Han Li.

“En efecto, tengo varios ases en la manga, pero está claro que tú tampoco has desatado tu verdadero poder. En cualquier caso, te lo concedo de todo corazón, y puedes hacer lo que quieras con el verdadero inmortal que he sellado. Sin embargo, tengo una condición: si puedes matar a ese verdadero inmortal, debes hacerlo mientras yo esté presente. De lo contrario, no podré estar tranquilo”, dijo el Monarca Espíritu con expresión seria.

“Eso no es un problema. Hace poco refiné un nuevo tesoro que podría ser útil aquí”, respondió Han Li con voz significativa.

El Monarca Espíritu se quedó bastante perplejo al oír esto, pero estaba extasiado de que Han Li hubiera aceptado su condición e inmediatamente condujo a Han Li de vuelta hacia la sala.

……

Medio mes después, las restricciones sobre la Montaña del Espíritu Oculto se abrieron y un rayo de luz azul salió volando antes de aterrizar en el arca negra gigante que esperaba en el cielo.

Instantes después, sonó un estruendo y el arca se alejó volando en la distancia.

Han Li estaba sentado en una cámara secreta en el nivel inferior del arca, apreciando un pequeño frasco verde en su mano con expresión contemplativa.

Hacía varios días, había buscado con éxito el alma de aquel inmortal sellado con su inmenso sentido espiritual.