El Sistema Más Fuerte - Volume 2 - TSS – Capítulo 405
Capítulo 405: El aura del tesoro que cubre el cielo
“Hermano Mayor Ni, Hermano Mayor Yin, voy a esculpir unas lápidas para ambos. Solo esperen y vean el show que está por venir. Yo, su hermano menor, les voy a dar una buena paliza a todos. En cuanto a los otros hermanos mayores, no me molestaré en hacerles unas lápidas. Después de todo, solo nosotros tres tuvimos una relación estrecha en ese entonces… No se vayan a emocionar tanto y empiecen a llorar en el inframundo.” Lin Fan sacó dos piezas de preciosos Cristales Celestiales. Usando su dedo como una daga, talló y grabó sus nombres en una lápida. Luego colocó estas lápidas a un lado.
Mirando las lápidas, Lin Fan no pudo evitar suspirar profundamente. Pensar que tenían esperanzas y sueños de volverse fuertes juntos en ese entonces. Pero ahora, cuando su hermano menor se había hecho tan fuerte, ya no tenían la oportunidad de verlo.
Lin Fan sacó un banco de su inventario y se sentó con melancolía en medio del campo de entrenamiento. Qian Kunzi y los otros seis ancianos seguían rodando por el suelo miserablemente.
Ese tipo de dolor era algo que nadie podía siquiera imaginar. Torturaba directamente la mente de uno. Aunque el nivel de sus cultivos era bastante decente, eso no importaba en lo más mínimo frente a la patada de Lin Fan, que podía afectar a todos sus posibles descendientes.
Lin Fan construyó siete pilares que se elevaron hacia el cielo y los puso de manera alineada.
“Qian Kunzi, no me guardes rencor. Después de todo, éste es el resultado de tus acciones.” Lin Fan dijo casualmente. Moviendo su túnica, todas las ropas de estas siete personas se rasgaron al instante, dejando al descubierto sus partes bajas, que ahora estaban cruelmente mancilladas, al aire libre.
Lin Fan los miro solo un instante, siendo incapaz de mirar un segundo más. Se veían bastante asquerosos.
“¡Tú… eres un… demonio…!” En este momento, las palabras de Qian Kunzi no eran muy claras. Cuando terminó de tartamudear esas palabras, volvió a aullar de dolor.
“¡JA…!” Lin Fan se río fríamente. Siete cuerdas ataron los pilares antes de lanzarlos a su inventario.
Era hora de esperar por ellos con calma. Debía esperar a que todos esos tipos se reunieran antes de acabar con todos ellos de un solo golpe.
Lin Fan sacó a Pollito.
“¡Cuco…!” En el momento en que Pollito salió, chilló fuertemente. Entonces, batió sus alas y miró a Lin Fan enojado con sus brillantes y relucientes ojos. Era como si estuviera reprochándole a Lin Fan por haberlo tenido ahí tanto tiempo.
Mirando la forma en que reaccionó Pollito, Lin Fan no pudo evitar reírse a carcajadas: “Entiendo, cálmate Pollito. Ve allí y actúa como un pollo normal. Me aseguraré de que pronto disfrutes de un buen espectáculo.”
Pollito miró a Lin Fan con cautela. ¿Por qué la expresión de su hermano mayor se veía tan sospechosa? Por otro lado, la idea de poder disfrutar de un buen espectáculo no tardó en alegrar su corazón y empezó a mover su trasero mientras avanzaba lentamente hacia adelante. Entonces empezó a actuar como un pollo feliz y a caminar con naturalidad.
Lin Fan no podía esperar a ver lo feas que se pondrían las caras de aquella gente más tarde.
…
El tiempo pasó rápidamente. Pollito ya se había echado una pequeña siesta. En cuanto a Lin Fan, estaba sentado con los ojos cerrados, pensando en algunas cosas.
De repente, abrió los ojos y miró al vacío.
“Parece que ya están aquí”. Lin Fan entró en modo sigiloso y se sentó allí, esperando en silencio la llegada de esas personas. Se preguntó qué pensarían cuando llegasen aquí y viesen la enorme cantidad de tesoros.
De repente, una onda expansiva apareció en los cielos.
Una por una, el aura que representaba a las personas fuertes de este mundo apareció.
Unas cuantas figuras aparecieron inmediatamente en el cielo sobre la Secta Qiankun. Estas personas intercambiaron miradas entre sí, preguntándose qué es lo que estaba sucediendo en este momento.
Inmediatamente, otra gran cantidad de gente llegó atravesando el vacío. Lin Fan miró a estas personas en el aire y encontró algunas caras familiares. Pero, aún no todos estaban presentes. Debería esperar un poco más…
“¿Qué demonios le pasó a la Secta Qiankun?”
“Me pregunto lo mismo. No hay ni una sola persona alrededor. Es extraño.”
“¡Chicos, miren allí!” Uno de ellos señaló el campo de entrenamiento de la Secta Qiankun y gritó. En el momento en que la mirada de todos se enfocó en ese lugar, la expresión de sus rostros cambió mientras se apresuraban a bajar.
Cuando llegaron a esa montaña de tesoros, su respiración se volvió irregular y acelerada. ¡Nunca antes habían visto tantos tesoros reunidos en sus vidas! ¡Qué espectáculo tan asombroso!
“¡Todos, antes de que lleguen los demás, dividamos esto rápidamente!”
“¡Sí, tienes razón! En estas circunstancias, no pasará mucho tiempo antes de que más gente venga aquí. ¡Para entonces, aunque quisiéramos, será difícil para nosotros conseguir más tesoros!”
Y justo entonces, una risa desenfrenada sonó desde el cielo.
“Oigan ustedes, ¿están tratando de dividirse el botín sin ni siquiera haber llegado yo? ¿No les parece un poco irrespetuoso?” Un hombre vestido con una túnica negra apareció en el cielo acompañado por unos cuantos ancianos.
Mirando la montaña de tesoros en el campo de entrenamiento, estaban igualmente sorprendidos.
Madara Info
Madara stands as a beacon for those desiring to craft a captivating online comic and manga reading platform on WordPress
For custom work request, please send email to wpstylish(at)gmail(dot)com