El Mago Devorador de Libros - Volume 2 - BEM - Capítulo 101
BEM: Capítulo 101 – Gran Bosque (3)
Al día siguiente, las personas quienes habían pasado la noche casi entera en vela, entraron al Gran Bosque tan pronto como salió el sol. La vista de los árboles y arbustos que superan por mucho la altura de un ser humano era realmente fantástica. Mientras entraban, los rayos de luz solar desaparecieron, dejando sólo unas pocas líneas atrás.
Sin embargo, esa no fue la única cosa que cambió para el grupo.
“Será más rápido si avanzamos por la derecha.”
“Ah, ¿es así?”
A diferencia de ayer, cuando el Maestro de la Torre Blanca había estado a cargo, Edwin y Theo eran ahora los líderes del grupo. Aparte de Edwin que conocía el bosque, ¿por qué Theodore había asumido este papel? Fue a causa de la noche anterior. Su capacidad de detección, le permitió percatarse de las criaturas más rápido que nadie, así que era inevitable tener la plena confianza del Maestro de la Torre Blanca.
Como resultado de ello, fue el segundo guía para esta misión.
Bueno, para ser precisos, es el papel de Mitra. Theodore era consciente del peso de la pequeña niña en su cabeza.
Cada vez que él daba un paso, el brote de Mitra daría vueltas como un molinillo. La brillante y alegre voz se escuchó desde arriba de su cabeza, en unisono con el ritmo del giro. No sabía si era porque le gustaba el ambiente del Gran Bosque o por alguna otra razón, pero Mitra estaba muy emocionada después de entrar en el bosque.
“Mitra.”
[Heeeee—… ¿Woong?]
“Voy a tener que depender de ti una vez más.”
Como si hubiera estado esperando, Mitra extendió los brazos. [¡Hoing!]
Ella ahora estaba familiarizada con la manera de usar el poder, por lo que el brote emergió de forma natural. La misteriosa luz verde se propagó, y un paisaje apareció en la cabeza de Theo. La ruta se dividía a la izquierda y a la derecha, así que comprobó todas las posibilidades. Theodore se encontró con que no había nada en el camino de la izquierda, luego miró el de la derecha.
Sin embargo, una sutil expresión de pronto apareció en su cara.
“Sir Edwin.”
“Sí, Benefactor.”
“¿Este bosque tiene lobos con cuernos en sus frentes? Si vamos tres kilómetros por el sendero de la derecha, nos encontraremos con ellos.”
“Lobos con cuernos en la frente… Tal vez es el lobo con cuerno de trueno.”
Edwin aceptó las palabras de Theo, sin dudarlo, ya que Theo había demostrado sus habilidades varias veces ya. En un bosque donde no podían ver más allá de 100 metros, la capacidad de detección de Theo fue muy útil. Gracias a eso, no encontraron ninguna criatura ni una vez y fueron capaces de ir a través del Gran Bosque sin ningún tipo de interrupciones.
“Entonces debemos evitarlos. Va a ser molesto si nos molestan.”
“¿Son lo suficientemente peligrosos para causar daño?” El Maestro de la Torre Blanca le preguntó desde donde había estado escuchando su conversación.
“No, ellos no son peligrosos. No se trata de una criatura que puede sobrevivir en las profundidades del Gran Bosque. La mayor amenaza de los lobos con cuerno de trueno no es su poder de combate, sino el ruido.”
“¿El ruido?”
“Un trueno surgirá desde el cuerno en su frente y producirá una explosión de sonido que es exactamente como un trueno. Llamará a todas las criaturas en los alrededores y luego huirá para sobrevivir.”
Ciertamente, era mejor evitarlo. La delegación asintió con la cabeza por la fácilmente comprensible explicación.
Los magos se especializaban en determinados campos, pero la mayoría de las criaturas que vivían en el Gran Bosque eran desconocidas para ellos. Así, el consejo de Edwin, que había vivido allí durante cientos de años, era más confiable que cualquier manual.
Gracias a la orientación de estas dos personas, el grupo fue capaz de reducir la fricción innecesaria. Cuando hubieron ocasiones en que tuvieron que enfrentarse a las criaturas…
¡Piing!
Edwin sólo necesitaba disparar su flecha una vez a las criaturas para desalojar el lugar.
Era diferente de la flecha de tormenta que había causado una destrucción masiva. Esta fue una rápida y translúcida flecha que se dividia en decenas o cientos de piezas y traspasaba las cabezas de las criaturas. Era una técnica que encajaba a la perfección con el término ‘lluvia de flechas.’
Decenas de cuerpos sin cabeza rodarían por suelo al instante.
Sorprendente. Esta es una fuerza de clase maestro. Theo admiró a Edwin interiormente mientras observaba los cuerpos sin vida. Era increíble que el poderoso Edwin fuera tan amable con él.
Independientemente de si son trols o ogros, todas aquellas personas afectadas por la flecha iban a morir. A pesar de la falta de poder en comparació con la Bala Mágica de Theodore, la velocidad de la flecha y su extraordinaria trayectoria eran realmente aterradoras. Incluso si Theo la predecía con su sexto sentido, él no podría ser capaz de evitarla o defenderse de ella.
No, teniendo en cuenta que Edwin no estaba serio ahora, su flecha era posiblemente más amenazante que la Bala Mágica.
“…Estoy muy contento de que sea amable, ¿verdad?”
[¿Hoi?] Mitra hizo un sonido de pregunta, pero Edwin había terminado de arreglar la situación y regresó. Él señaló el espacio vacío donde docenas de criaturas habían estado previamente y dijo, “Benefactor, tomemos un descanso aquí.”
“¿Aquí?”
“Sí. En el futuro, estarán muchos de los hábitats de las criaturas poderosas, y es probable que no vayamos a ser capaces de evitarlas por completo, incluso con las habilidades del Benefactor. Este es el último lugar donde se puede descansar adecuadamente.”
Theodore estaba convencido y miró al Maestro de la Torre Blanca.
Orta levantó la mano en acuerdo y dijo, “Tomen un descanso en ese lugar vacío. Nos moveremos en dos horas, por lo que se les permite hacer lo que quieran hasta entonces. Coman, duerman, tomen cualquier acción que ustedes piensen necesaria. Si causan molestias innecesarias, serán severamente castigados.”
Los ojos de los magos brillaban por las palabras de ‘hacer lo que quieran’. ¿Por qué habían venido aquí? Fue a averiguar los secretos de la misteriosa tierra llamada el Gran Bosque. Ellos no se preocuparon por el cansancio que habían acumulado en los últimos dos días, ya que recogieron todo el material que les llamara la atención. Alguien incluso sacó una pala y comenzó a cavar en el suelo. La imagen de un mago elegante había desaparecido desde hace mucho tiempo.
Edwin miró la escena con una desconcertada expresión. “…Benefactor, los magos humanos de estos días son mucho más activos de lo que yo pensaba.”
Madara Info
Madara stands as a beacon for those desiring to craft a captivating online comic and manga reading platform on WordPress
For custom work request, please send email to wpstylish(at)gmail(dot)com