Culto de las Runas Sagradas - Volume 1 - CSR - Capítulo 65

Capítulo 65 — Baluarte

De la sorpresa de haber adquirido las píldoras valiosas a ser enfrentados a cuatro Guerreros, el semblante de Ye Wei cambió dramáticamente, y a juzgar por la presión que sentía, cada uno de ellos era más fuerte que él.

Entregar las píldoras valiosas no podía siquiera ser considerado, y Ye Wei no buscaba las píldoras en la bolsa interespacial, sino que buscaba los rollos Místicos. Sus pequeños movimientos no escaparon de los ojos de Lin Zi Yan, ella detuvo la mano de Ye Wei y sacudió ligeramente la cabeza.

Lin Zi Yan volteó a ver a los cuatro Guerreros, y un destello púrpura apareció en sus ojos, el cual le ayudó a ver el nivel de cultivo de ellos. Ella pudo ver su cultivo en un vistazo. Dos de ellos que estaban en medio eran Guerreros cinco estrellas, mientras que los otros dos eran Guerreros cuatro estrellas.

Sin previo avisto, los Guerreros cuatro estrellas caminaron rápidamente hacia adelante y levantaron sus manos mientras cuerdas de luz brillante salían de sus dedos. “¡Dennos las píldoras!”

“¡En sus sueños!”, gruñó Lin Zi Yan. Su fuerza-de-voluntad y Qi salieron de golpe de su cuerpo simultáneamente hacia su dedo, haciendo uso de esto, ella terminó de dibujar una secuencia de runas antes que los Guerreros cuatro estrellas pudieras.

“¡Ustedes se lo buscaron! ¡No nos culpen si mueren!”, gritaron los Guerreros, y movieron sus dedos liberando dos dagas oscuras, de tres pulgadas, hacia Ye Wei y Lin Zi Yan. Estas penetraron el aire frío de la habitación y separaron la niebla fina sobre el suelo en tres secciones, mientras los azulejos de jade se rompían.

Las dagas se auto-guiaron hacia el blanco; se acercaron lo suficiente como para que Ye Wei pudiera sentir cuán afilado era el borde de las dagas rúnicas.

Este era el momento que Lin Zi Yan estaba esperando. Ella puso su mano sobre el hombro de Ye Wei e inyectó Qi a la secuencia de runas. La postura se activó y una nube de luz apareció alrededor de ella.

“¡Cambio de Sombra!”

La postura convirtió a Ye Wei y a Lin Zi Yan en sombras mientras dejaba hologramas de ambos donde habían estado parados. Con una ráfaga de velocidad, ellos escaparon de la casa de piedra antes que cualquiera de los cuatro Guerreros se diera cuenta.

Las cortantes dagas rúnicas atravesaron los hologramas y aterrizaron en la pared detrás de estos. “Esa postura no era un escudo, ¡esos eran hologramas!” Pero cuando se dieron cuenta de lo que había pasado ya era demasiado tarde, y las sonrisas de los cuatro Guerreros vestidos de azul se disolvieron.  Cegados por la ira, empezaron a gritar histéricamente mientras buscaban la casa por Ye Wei y Lin Zi Yan. Ellos habían eliminado por completo la posibilidad que hubieran escapado de la casa ya que creían que la puerta estaba bien asegurada.

Empezaron a discutir y a culparse unos a otros, y sus gritos estaban haciendo temblar la casa y hacían eco en el túnel. Ninguno de ellos podía superar el hecho que una chica y un chico flacucho se libraron de ellos con tanta facilidad con todo y tesoros, el resentimiento era enloquecedor.

“Zi Yan, ¿qué postura era esa?”, preguntó Ye Wei a Zi Yan mientras se mezclaban en la multitud en el túnel que se dirigía hacia las partes más profundas de las catacumbas de Niebla de Sangre.

“Postura Espiritual de nivel medio, Cambio de Sombra, realmente no es nada elegante. ¿Quisieras aprenderla? Cuando seas un Estudiante siente estrellas, ¡te la enseñaré!”, dijo Lin Zi Yan mientras se reía del rostro de sorpresa de Ye Wei. Él todavía intentaba entender la mecánica de la postura Cambio de Sombra.

“¡Sí!”, asintió Ye Wei sin la menor vacilación. La postura no era poderosa, pero su practicidad la hacían un activo valioso para todo aquel que pudiera dominarla. Era utilizable tanto ofensiva como defensivamente y, por su puesto, para escapar, como Zi Yan acababa de demostrar.

Habían billones de posturas, cada una de ellas tomaba mucha práctica para ser dominada, y cada de una de ellas fue inventada para una situación en especial. Un cultivador común podía dominar alrededor de 40 posturas en toda su vida; por lo que era sabio elegir algo a lo que le hallaba utilidad.

“Sí, estaría bien, ¡pero necesito llegar al nivel siete estrellas rápido!” Ye Wei sacó una píldora Luna Plateada de su bolsa, y la puso en su boca. La píldora se derretía en su boca y entraba a su cuerpo mientras una cálida oleada de energía hallaba su camino hacia sus meridianos y viajaba a su Sentient.

Lin Zi Yan también tomó una. A pesar que era una práctica común el sentarse y cultivar después de tomar una píldora extintora para absorber la energía de manera eficiente, también podían usar sus efectos para moverse más rápido, aumentando así la posibilidad de encontrar lo que necesitaban en los túneles.

El cuerpo de Ye Wei todavía estaba absorbiendo los efectos de la píldora a pesar que se estaba moviendo, lo que fortalecía su físico. Ye Wei absorbió alrededor del 30 % de la energía efectiva de las píldoras Luna Plateada, y su dantian y Sentient estaban haciendo ruido más vigorosamente que cuando tomaba la Extintora del Sol Fiero.