Culto de las Runas Sagradas - Volume 1 - CSR - Capítulo 59

Capítulo 59 – Cuidando

Al ver el rostro lleno de culpa de Ye Wei, Lin Zi Yan no sabía cómo reaccionar. Agarró su manta fuertemente y suspiró profundamente.

[¿Debería guardar rencor hacia Ye Wei por esto?] [Sus intenciones eran buenas, y si no fuera porque él cuidó de mí, con las heridas que recibí accidentalmente podrían haberme matado…]

Sintiéndose apenada e intentando mantenerse calmada, los razonamientos de Lin Zi Yan le dijeron que debería dejar de lado el accidente, pero sus emociones no se lo permitían.

“Ye Wei”. El sonrojo en el rostro de Zi Yan no mostraba signos de desaparecer mientras levantaba la cabeza para ver a Ye Wei a los ojos. Ella dijo: “lo que viste no puede salir de esta habitación, ¿entendido?”

“¡Mis labios están sellados!” Asintió gravemente Ye Wei al ver que Lin Zi Yan parecía preparse para enterrar este incidente y seguir adelante, pero se sentía intranquilo, y no sabía por qué.

“Si otras personas llegaran a enterarse de lo que pasó hoy… ¡podrías ser asesinado!”, le advirtió Lin Zi Yan en tono serio.

Ye Wei estaba confundido de por qué Zi Yan tendría tanta precaución sobre lo que había ocurrido, y se preguntó si ella no lo creía digno de su confianza. Él nunca diría algo que pudiera arruinar la reputación de ella, sin importar qué ocurriera.

[Se ve bastante lindo cuando está confundido]. [A pesar de verse bastante infantil, es un chico bastante guapo…], divagó la mente de Lin Zi Yan. [¡¿Qué estoy pensando?!]

El repentino ataque de irracionalidad no podría decirse que le ayudaba a recuperar su fuerza. Intentó incorporarse, pero su dantian y sus meridianos en sus extremidades seguían débiles, por lo que desistió de seguir cuando se dio cuenta de lo flojas que estaban.

“Ye Wei, ¿me podrías hacer un poco de comida?”, prefirió recurrir a pedir ayuda.

“¡Enseguida!”, respondió Ye Wei de manera reflexiva y corrió escaleras abajo hacia la cocina. Los Ye tenían sirvientes, pero también eran instruidos en las cosas básicas desde temprana edad, lo cual lo convirtió en un buen cocinero para alguien con su nivel social y familiar.

Pronto luego de haber bajado, Ye Wei regresó con una bandeja con un plato de congee caliente y unas píldoras.

Mientras Ye Wei estaba escaleras abajo cocinando, Zi Yan intentó refortalecer su cuerpo llenando su cuerpo de Qi pero falló miserablemente debido a la herida en su dantian.

“Zi Yan, déjame ayudarte a sentarte…”, lo extraño en el ambiente permanecía, pero ella era incapaz de cuidarse por su cuenta en estos momentos.

“Sí”. asintió tímidamente Lin Zi Yan.

Ye Wei puso la bandeja en la mesa de noche y la agarró de la mano para ayudarla a levantarse. Después la sostuvo con brazo izquiero y la alimentó cucharada a cucharada.

Su contacto físico no ayudó a aligerar el ambiente.

Al sentir la palma cálida de Ye Wei en su espalda le producía escalofríos. Era una cosa el saber que él la había visto y tocado cuando estaba apenas consciente, pero era muy distinto experimentarlo al estar completamente despierta. A pesar que ella estaba muy conciente que él no era lo suficientemente fuerte como para protegerla, nunca se había sentido más segura de cómo se sentía ahorita apoyándose en su pecho y sintiendo el ritmo de su corazón.

En este momento, Lin Zi Yan era solo una adolescente que se dejaba llevar por la situación, y ella no sabía que este recuerdo permanecería en su corazón y la revisitaría más seguido de lo que hubiera podido imaginar.