Cuando un Mago se Revela - Volume 1 - WAMR - Capítulo 4
Capítulo 4: Excavando una nueva dimensión de la conciencia
De noche, en lo profundo de la densa jungla, las posiciones de Michelle y Annie permanecieron iguales; una adelante y la otra detrás de Kubei.
Pero dentro de la mente de Kubei, la voz robótica seguía repitiendo las mismas palabras.
Esas palabras eran del hechizo que usó Annie.
– Si realmente quieres aprender magia, pídeles a esas dos que te enseñen en vez de pedirme que lo repita.– El Sistema se quejó frustrado después de repetir el hechizo hasta la exasperación.
“Eso sólo puede ocurrir si están dispuestas a enseñarme y no a torturarme hasta que me desmaye por la pérdida de sangre”.
Kubei no se dio por vencido a pesar de que no había dominado el encantamiento,
“No te detengas, continúa.”
Después de descubrir la utilidad del Sistema, estuvo investigando el hechizo por casi media hora.
Al mismo tiempo, Michelle también avanzo durante media hora. Según ella, la ubicación del cofre del tesoro ya estaba cerca. Deberían poder llegar después de otra hora de caminata.
Kubei estaba feliz. De hecho, estaba realmente feliz.
El viaje desde la base subterránea hasta el cofre del tesoro fue como un infierno para él. Tuvo que arrastrar su débil cuerpo mientras era seguido – (y de vez en cuando azotado) – por Annie quien estaba en la retaguardia. Si el viaje se alargara más, podría morir a mitad de camino.
Al mismo tiempo, tiene que soportar el estrés de estar al borde de la muerte, porque si Michelle lo descubre, podría morir.
Bajo ambas premisas, prefería la de llegar antes al destino.
– Viendo que eres tan débil, no creo que seas capaz de aprender magia, así que, por favor, ¡ahórrame esto!– El Sistema comenzó a romperse después de repetir el encantamiento unas 100 veces seguidas.
– No, la estoy tratando como una canción déjala en bucle.
Kubei no planeaba dejarlo descansar.
Antes, el sistema era rápido para dar información estúpida e inútil – ¿cómo podía Kubei prescindir de ella ahora que tenia de alguna utilidad? Esto es lo que llamas Karma instantáneo.
Con respecto al hechizo, no parecía que pudiera encontrar ninguna forma de aprenderlo en este momento. Pero ya que era su única pista sobre el hechizo, por supuesto que no se lo tomaría a la ligera. Los proverbios chinos tienen razón: Cuando un libro es leído cien veces, el significado vendrá a ti naturalmente, y los hechizo igual, probablemente.
Si una o dos veces no funciona, ¡entonces lo escuchará un par de miles o millones de veces!
Kubei sabe que muchas veces el método más tonto puede ser el más eficiente.
– Sinceramente, en vez de confiar en los hechizos, deberías pensar en una forma de escapar.– El Sistema empezó a aconsejarle: – Puedes aprender magia lentamente más tarde, si mueres ahora, aunque aprendas el hechizo, será inútil.
Kubei pensó por un tiempo y asintió, “Sí… tienes razón.”
Después de escuchar esto, el Sistema sintió que iba a llorar. Su voz robótica temblaba como un viajero perdido el cual encontró un oasis en el desierto.
Finalmente, ¡Puede dejar de repetir el hechizo!
Después de eso, Kubei dijo:
“Bueno, ¿tienes algún plan para escapar?”
El sistema se quebró una vez más.
Kubei escuchó lo que parecían ser circuitos rompiéndose.
Incluso en contra de su voluntad, el Sistema volvió a iniciar el bucle.
Una vez, dos veces, tres veces……. Kubei se despojó de todos sus otros pensamientos, y se concentró completamente en el hechizo. Durante este proceso, el mundo se volvió borroso y distante. En su mundo, lo único restante era el hechizo.
Ese majestuoso, incomprensible y misterioso hechizo.
Poco a poco fue concentrando todos sus sentidos y sintió que abandonaba su cuerpo mientras entraba en un estado místico.
Sus pupilas dejaron de moverse y el color se desvaneció del todo, como si fuera una persona ciega. Su respiración y circulación sanguínea también se ralentizaron gradualmente. Las piedras afiladas penetraban la piel de sus pies, pero no sintió nada.
Annie no se fijo en su estado actual. En su opinión, el cuerpo de Kubei sólo se estaba debilitando.
El cuerpo de Kubei siguió avanzando por sí mismo y no sentía nada.
Pero él estaba consciente en su mente.
Kubei se dio cuenta de repente de que estaba en una dimensión extraña.
– ¿Dónde……? ¿estoy?
Era un vacío interminable con silencio absoluto.
Era totalmente oscuro.
Este lugar era como hielo que congelaba su alma, haciendo difícil pensar. No podía sentir vibraciones, calor, los latidos de su corazón o el flujo sanguíneo…
Ni siquiera podía sentir el paso del tiempo.
Una sensación de peligro se apoderó de él. Era como si se hubiera caído en un pantano y una especie de sustancia negra pegajosa lo estaba ahogando lentamente.
No podría pasar nada bueno si esto continuara.
Empezó a luchar, pero su cuerpo era como el de un ratón sacado del puerto USB, no hubo respuesta a pesar de moverse. Intentó llamar al Sistema, pero no hubo respuesta. En poco tiempo por el frío, su cerebro, Dejo de pensar, así como cuando a un ventilador se le desconecta de la red eléctrica, dejo de girar y empezó a recoger telarañas y polvo.
El pantano tragó hasta el final de la última uña que todavía estaba sin cubrir.
Sus pensamientos se detuvieron, y perdió el conocimiento.
…..
Continuó durante mucho tiempo, o tal vez poco tiempo.
Entonces como cuando un río se descongela con la llegada de la primavera, como si algo lentamente se filtrara en este espacio. Kubei recuperó la consciencia.
¿Qué……? ¿algo viene?
Volvió a pensar.
Tenía curiosidad por saber lo que estaba viniendo, pero se dio cuenta de que sus cinco sentidos habían desaparecido y no podía sentir nada. Era como un punto en una superficie interminable, y no había nada que pudiera hacer.
Pero no se dio por vencido y continuó luchando contra las fuerzas que lo ataban a este lugar.
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